Este trabajo lo he hecho con mi madre, Encarna Marzo.
Mi madre vivía en Rubielos de la Cérida.
Los días más importantes de estas fiestas eran:
Noche Buena: cenaba toda la familia junta y después se iba por todas las casas hasta las doce, cuando se iban todos a la misa del Gallo.
El Día de Navidad: igual.
Nochevieja: como ahora, pero en vez de uvas comían 12 pasas.
Año Nuevo: igual.
Día de Reyes: para la madrugada del cinco de Enero se ponía, en las ventanas más altas de la casa, un tarro de cebada y otro de agua, para los camellos de los Reyes Magos, que siempre iban de madrugada.
Decoración:
Solamente se ponía un Belén muy grande con musgo. Todo el decorado era natural excepto las figuras. Todos los niños del pueblo, unos días antes de Navidad, se juntaban para montar un Belén muy grande en la iglesia.
Villancicos y los instrumentos:
En Noche Buena con panderetas, castañuelas y botellas de cristal, se pasaba por todas las casas a cantar villancicos. Algunos de ellos eran:
“25 de Diciembre”.
“Está noche es Noche Buena”
“La Virgen se está cambiando”.
Comidas especiales:
Turrón, sólo se comía los días especiales, solo Jijona y de almendras, luego en las casas se hacía uno de azúcar quemado y almendras.
Para Noche Buena se comía cardo y pavo guisado.
Para Reyes, el Roscón con sorpresa y pastas que se hacían en el horno del pueblo.
Regalos:
Siempre se regalaban cosas para el colegio: estuches, carteras, gomas… excepto una vez que le regalaron una muñeca con biberón y cascabel.
Recuerdos:
Lo que más recordaba era que cuando iban a cantar los villancicos, empezaban un grupo pequeño y acababa todo el pueblo.
La noche anterior al día de Reyes, la noche del cinco, recuerda con la ilusión que preparaban la comida para los camellos.
Casi no dormía por la noche y creían escuchar ruidos, cuando “iban los Reyes Magos a su casa a dejar los regalos”.
Mi opinión: me ha gustado mucho saber cómo celebraba mi madre la Navidad antes y a mí me
habría gustado vivir en la época de mi madre.
Opinión de mi madre: me trae buenos recuerdos, la Navidad de cuando era pequeña, porque eran unos días muy bonitos. No se pensaba en los regalos ni en lo material. Al ser un pueblo pequeño, se disfrutaba mucho y era muy divertido estar todo el pueblo haciendo las cosas juntos.
Ángel Gómez Marzo.
Mi madre vivía en Rubielos de la Cérida.
Los días más importantes de estas fiestas eran:
Noche Buena: cenaba toda la familia junta y después se iba por todas las casas hasta las doce, cuando se iban todos a la misa del Gallo.
El Día de Navidad: igual.
Nochevieja: como ahora, pero en vez de uvas comían 12 pasas.
Año Nuevo: igual.
Día de Reyes: para la madrugada del cinco de Enero se ponía, en las ventanas más altas de la casa, un tarro de cebada y otro de agua, para los camellos de los Reyes Magos, que siempre iban de madrugada.
Decoración:
Solamente se ponía un Belén muy grande con musgo. Todo el decorado era natural excepto las figuras. Todos los niños del pueblo, unos días antes de Navidad, se juntaban para montar un Belén muy grande en la iglesia.
Villancicos y los instrumentos:
En Noche Buena con panderetas, castañuelas y botellas de cristal, se pasaba por todas las casas a cantar villancicos. Algunos de ellos eran:
“25 de Diciembre”.
“Está noche es Noche Buena”
“La Virgen se está cambiando”.
Comidas especiales:
Turrón, sólo se comía los días especiales, solo Jijona y de almendras, luego en las casas se hacía uno de azúcar quemado y almendras.
Para Noche Buena se comía cardo y pavo guisado.
Para Reyes, el Roscón con sorpresa y pastas que se hacían en el horno del pueblo.
Regalos:
Siempre se regalaban cosas para el colegio: estuches, carteras, gomas… excepto una vez que le regalaron una muñeca con biberón y cascabel.
Recuerdos:
Lo que más recordaba era que cuando iban a cantar los villancicos, empezaban un grupo pequeño y acababa todo el pueblo.
La noche anterior al día de Reyes, la noche del cinco, recuerda con la ilusión que preparaban la comida para los camellos.
Casi no dormía por la noche y creían escuchar ruidos, cuando “iban los Reyes Magos a su casa a dejar los regalos”.
Mi opinión: me ha gustado mucho saber cómo celebraba mi madre la Navidad antes y a mí me
habría gustado vivir en la época de mi madre.
Opinión de mi madre: me trae buenos recuerdos, la Navidad de cuando era pequeña, porque eran unos días muy bonitos. No se pensaba en los regalos ni en lo material. Al ser un pueblo pequeño, se disfrutaba mucho y era muy divertido estar todo el pueblo haciendo las cosas juntos.
Ángel Gómez Marzo.
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